Being boring
Si hay algún aliado más terrible para la estupidez, éste es el aburrimiento. Cometemos gran parte de nuestros errores como especie al intentar flotar sobre el tedio con las brazadas de la cortedad de miras.
Echo un vistazo alrededor de mi ombligo y me pregunto si no hay cosa más inaguantable de uno mismo que el ser aburrido, que provocar bostezos y miradas distraídas, que incitar a los peligros de la natación estilo espalda a la sensatez. Qué escalofríos me doy.
Quiero pensar que para crecer hay que situarse en permanente adolescencia, y que a esas edades lo peor es aburrir. No pido disculpas por pintar ya canas, en realidad eso me alegra. Lo que no quiero es hacerles bostezar.
3 comentarios:
Doy fe que no eres aburrido. Fácil de alterar sí, pero no cansino.
Iba a decir justo lo mismico que re. Para aburrir tú, ya tienes que tener a alguien muy 'penco delante. En realidad, a los adolescentes no les importa aburrir, porque no se dan cuenta de que lo hacen. Se supone que estamos "más vivíos" y, también, que para gustos, los colores... Vamos, que no todos nos aburrimos con lo mismo.
Tú sigue que vas bien. Besos
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